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Llamada científicamente (Machine Learning) o Máquina que aprende, la inteligencia artificial no existe.
No existe nada en el mundo que sea artificial e inteligente a la vez. La inteligencia trae consigo su independencia, no depende de nada ni de nadie para ser. Lo artificial depende de algo mecánico repetitivo. El robot depende del hombre que le da la información o de otro robot que ya tiene la información. Un robot sin información no puede actuar. La creencia que se van a multiplicar solos, que llegarán a pensar más y mejor que nosotros, que podrán tomar el poder y control sobre ellos mismos y lograrán gobernar la tierra es solo ficción y una imposibilidad física. En cualquier momento a un robot lo podemos desprogramar o desconectar.
¿Será posible llamar Inteligencia Artificial a uno de los inventos más antiguos del hombre; el cuadrante solar? Sus inventores reunieron información y construcción mecánica. En un muro fijaron una barra paralela al eje terrestre, dibujaron un cuadrante con diferentes puntos correspondiente a cada hora del día por donde se desliza la sombra de la barra, que como en una pantalla, nos dice qué hora es… La historia de los cuadrantes solares data de los Caldeos, 2234 años A. C.
Un computador le gana al mejor jugador del mundo en ajedrez, no porque sea más inteligente que el ser humano, no, le gana porque le han dado los datos BigData con la información de todas las posibilidades y por eso nunca se va a equivocar porque las tiene en su memoria. Lo máximo que un campeón puede lograr si no se equivoca, es conseguir un empate (tablas). Un scanner de imágenes médicas es un aparato que ha recibido información precisa y está cargado para leer ciertos parámetros necesarios para que la ciencia tome decisiones en un caso en particular. Un carro, un barco, un avión, un submarino que se guía sin conductor, telescopios espaciales, todos están llenos de información que los humanos descubrieron en sus investigaciones.
La tecnología se ha desarrollado a una velocidad sorprendente. No son los robots los que se han desarrollado, es la inteligencia humana la que ha crecido y ha creado los útiles técnicos y los conocimientos científicos para avanzar. Con una computadora científica es más fácil hacer operaciones sobre la velocidad de la luz que con un lápiz y un papel. El universo es enorme o infinito tal vez; se requiere una tecnología cada vez más avanzada para conocer y aplicar ese conocimiento a la vida práctica. La tecnología nos ayuda a ir más lejos, más profundo en el conocimiento.
Pero volvamos a la inteligencia artificial. Qué es un robot, es un aparato con un programa al cual se le han agregado los datos necesarios para cumplir la tarea asignada. Para que un robot reconozca un gato (1) el robot tiene necesidad de escanear cien mil fotografías de gatos en diferentes posiciones y colores; a diferencia de un niño que ve un gato una o dos veces y sabe que es un gato para toda su vida. El robot que ha recibido cien mil imágenes y no se le entró la imagen de un gato en un paracaídas, no va a reconocer el gato como un gato en paracaídas. Un carro autónomo tiene que recibir la información de todas las posibilidades en la ciudad, el campo, la carretera, la autopista, en verano y en invierno y cada posible situación que se le presente. Las posibilidades son innumerables por eso todavía está en experimentación.
El carro no puede reconocer la actitud emocional del conductor de otro carro, si el carro vecino tiene la prioridad y el conductor por amabilidad lo deja pasar, el carro sin conductor no va a comprender y se va a quedar en el sitio hasta que el otro pase. Alguien caminaba por una avenida con un aviso de stop en su morral y el carro se detenía cada 5 metros al ritmo del peatón. (2)
La experiencia mayor la hizo el artista alemán Simon Weckert, llenó una carreta tirada a la mano con 99 teléfonos que sincronizó todos con google maps y formó enormes trancones en las calles aledañas mientras que él caminaba solo por las calles vacías. Los GPS de los carros recibían la información de los 99 teléfonos todos sincronizados en la misma ruta. También los dos aviones Boeing 737 Max que se cayeron poco tiempo después de partir por fallas en su sistema computarizado Esos vacíos informáticos siempre los va a tener la mal llamada Inteligencia Artificial que sólo puede actuar para el fin que fue creada.
Existe el juego oriental GO que se juega con piedras negras y blancas en un tablero cuadrado y las posibilidades tienden al infinito a diferencia del ajedrez que son finitas, por eso no existe robot que pueda ganarle todo el tiempo al jugador de GO. Aquí es donde encontramos el gran problema de la mal llamada Inteligencia Artificial, el consumo de energía.
“Más allá de esta necesidad de datos, el gasto de energía de las computadoras requerido para el desarrollo de algoritmos de IA (inteligencia artificial) crece rápidamente. Por ejemplo, las experiencias de algunos artículos de investigación recientes sobre aprendizaje automático corresponden al consumo de electricidad de un hogar francés durante cien años. Esta inquietante glotonería energética es uno de los secretos mejor guardados por los grandes grupos industriales.” (IA et emploi: une menace artificielle; Philippe Askenazy et Francis Bach)
Como conclusión podemos decir que no existe la energía necesaria para cargar un robot con todas las capacidades cognoscitivas y de respuesta para hacerlo igual a un ser humano.
Un robot siempre será una máquina limitada y dependiente, jamás inteligente. Llamemos a la Inteligencia Artificial como lo que es: Memoria Artificial o mejor Base de Datos.(1) (2) Ejemplos tomados de la conferencia de Luc Julia Vicepresidente de Innovación en Samsung sobre IA que comenta su libro «L’intelligence Artificielle n’existe pas».
Créditos: Unsplash
