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El Premio La Linares de Novela Breve, en su edición 2023, determinó como ganador a Ernesto Torres Terán, por su novela Nadie le cree. Revista Rocinante entrevistó al escritor galardonado y a continuación presentamos un extracto de la conversación que sostuvo con Andrés Cadena.
Ernesto Torres Terán (Guayaquil, 1956) es novelista y cuentista. Ha publicado: Del Puerto secreto (relatos, 1982); Y sin embargo se mueve (relatos, 1993, Premio Único de relatos José de la Cuadra); Asedios Profanos (novela, 1996, Premio latinoamericano de novela Onetti-Rulfo, Uruguay); Los elefantes no existen (novela, 2001, Primera Finalista del concurso de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, núcleo del Guayas); Territorio de Fantasmas (relatos, 2006); Mínima gloria (premio único del concurso nacional de novela «Sesquicentenario de la biblioteca municipal de Guayaquil», 2012); Diecisiete ballenas en una pecera (premio internacional de novela juvenil Libresa, 2014); Teorema de Ovidio (novela, 2022); y Tu próxima movida (Premio nacional de novela Miguel Riofrío, 2022.
Pregunta: Felicitaciones por el premio. Ya que la novela aún no está publicada, y sin pedirle que nos devele su trama, ¿podría decirnos de qué trata Nadie le cree?
Respuesta: La novela cuenta los esfuerzos de una escort por vengarse del abuso de un cliente muy conocido en el ambiente del periodismo nacional, intocable. Plantea la lucha de una joven mujer contra un tipo todopoderoso; al final el lector no termina de saber qué mismo ocurrió gracias a un juego de ambigüedades sembradas por el narrador. Acaso no ocurrió nada, salvo en la mente de la protagonista. La escribí disecando Otra vuelta de tuerca, de Henry James.
P: ¿Qué fue lo que primero tuvo claro en la escritura de esta obra: alguna escena, un personaje, determinada emoción…?
R: En un primer momento, la fascinación por la maestría de James. Aparte de esto, tengo una lista de novelas que pretendo escribir, aunque me faltarán varias vidas para lograrlo. Dada esta limitación, suelo priorizar temas de variada índole para no repetirme. Claro está, aún contra mi voluntad, en mis novelas aparecen mis fobias y filias, mis inconfesados secretos, mis amores utópicos, y también mucho de esto mismo de gente querida o insoportable que conozco. En el caso de Nadie le cree, alguna vez una muchacha con aires de bien portada, fanática religiosa y del horóscopo, y que resultó ser una señorita alegre y sufrida, me contó su mala experiencia con un cliente VIP y su impotencia para vengarse. Vengarse del mal bicho era todo lo que le pedía a Dios y a la vida. Esa fue la semilla de mi ficción.
P: ¿Qué ha marcado en su trayectoria la escritura de esta novela, qué significado personal tiene esta obra para usted, en su carrera de escritor?
R: En realidad, nada en particular. Salvo que, como en los libros previos, continúo aprendiendo, encontrando nuevas formas de expresión, afinando mi voz narrativa, mi estilo. Para mí, el lenguaje y la estructura de una novela constituyen el alma del oficio; el resto es la argamasa necesaria.
La entrevista completa a Ernesto Torres Terán se la puede leer en Revista Rocinante 183, de enero 2024. La premiación del concurso La Linares de Novela Breve tendrá lugar este sábado 20 de enero, a las 11:30 en Casa Égüez Centro Cultural, en Quito.
