- Clickultura
- 0 Comments
- 1282 Views
Apenas nos hubimos encontrado
comenzó la distancia a destejernos
los ojos, las palabras, el asombro,
antes que se apretaran nuestras vidas
en la urdimbre del tiempo.
Y quedaron los hilos en el aire.
Un instante en el aire, como queda
un pájaro, su vuelo,
en tanto que lo borra
la tormenta.
Después, no más,
el viento.